Un nou microscopi electrònic per a la UB
Con este microscopio se podrá modificar la temperatura de la muestra, aplicar una polarización eléctrica y trabajar en medios líquidos. Por tanto, podrán verse los cambios estructurales o químicos que acontecen con resolución nanométrica, o incluso atómica, en procesos como la degradación de baterías electroquímicas o la síntesis de nanopartículas, entre otros. La posibilidad de trabajar con cámaras de detección directa de alta sensibilidad y ultrarrápidas abrirá la puerta a la reconstrucción de biomoléculas y virus en tres dimensiones, a la observación dinámica de la distribución de proteínas, virus o nanopartículas en las membranas celulares y al análisis de las interacciones de las proteínas a escala nanométrica para entender fenómenos de agregación o de estabilización de sustancias de interés terapéutico.
El rector de la Universidad de Barcelona, Joan Guàrdia, se ha felicitado por el hecho de que la UB incorpore una infraestructura singular, nueva: «La innovación forma parte del ADN de nuestra universidad. En este sentido, este microscopio, que se suma a la adquisición del primer aparato de resonancia magnética nuclear de muy alto campo del Estado, supone seguir avanzando en la línea de la investigación líder en distintos ámbitos de la ciencia».
Por su parte, el director de los CCiTUB, Juan Fran Sangüesa, ha afirmado: «Gracias a esta infraestructura singular, que conjuga las máximas prestaciones de un equipo de microscopia de alta resolución y analítica con unas prestaciones innovadoras, se podrá dar un fuerte impulso a proyectos interdisciplinares. De esta forma, se potenciará la colaboración con otros centros e institutos, no solo de nuestro entorno, sino también a escala nacional e internacional».
Francesca Peiró, coordinadora científica del nodo de Barcelona de la infraestructura científica y técnica singular ELECMI, remarca que «este equipo singular estará equipado con detectores de electrones y rayos X de última generación y posibilitará un control dinámico de la dosis de electrones y operación a bajo voltaje, lo que facilitará la experimentación con muestras sensibles al haz».
El nuevo aparato, que se ubicará en las instalaciones que los CCiTUB tienen en el Parque Científico de Barcelona, pasará a formar parte del catálogo de prestaciones de los Centros y, por tanto, será accesible a toda la comunidad científica, a las instituciones de investigación pública y al sector empresarial.
El proyecto MERIT está formado por un consorcio que lidera la UB y en el que participan el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC), la Fundación Bosch i Gimpera (UB), el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL), el Instituto de Investigaciones Biomédicas Agustí Pi i Sunyer (IDIBAPS) y la Fundación Sant Joan de Déu.
Los orígenes de la microscopia electrónica en la UB
Esta adquisición se produce cuando se cumplen 56 años de la llegada del primer microscopio electrónico de transmisión a la Universidad de Barcelona. El 16 de julio de 1966, el modelo Phillips EM 200 se instaló en lo que después sería el Servicio de Microscopia Electrónica de la Universidad de Barcelona, en el Patio de Ciencias del Edificio Histórico.
Este microscopio fue una herramienta de trabajo indispensable en muchas de las tesis doctorales de cariz ultraestructural que se redactaron entre los años 1973 y 1995. Mercè Durfort, catedrática de Biología de la UB recientemente fallecida, fue la primera que lo utilizó para realizar su tesis doctoral, Ultraestructura de la gónada femenina de algunos moluscos, que obtuvo la calificación de excelente cum laude en 1973.
Enlace a la nota de los CCiTUB.