Un Museo Virtual para el siglo XXI

Manuscrito del Llibre dels feyts, perteneciente al Fondo del CRAI Biblioteca de Reserva.
Manuscrito del Llibre dels feyts, perteneciente al Fondo del CRAI Biblioteca de Reserva.
Reportaje | Cultura
(15/11/2022)
El 15 de noviembre se ha inaugurado el nuevo Museo Virtual de la UB (MVUB), que incorpora un nuevo software que mejora el anterior. A las diecisiete colecciones que tenía hasta ahora, se han añadido cuatro nuevas, en una nueva interfaz más moderna que mejora su usabilidad. También se incorporan nuevas funcionalidades: exposiciones virtuales por temáticas y acceso a la visita virtual del Edificio Histórico en catalán, castellano e inglés.
Manuscrito del Llibre dels feyts, perteneciente al Fondo del CRAI Biblioteca de Reserva.
Manuscrito del Llibre dels feyts, perteneciente al Fondo del CRAI Biblioteca de Reserva.
Reportaje | Cultura
15/11/2022
El 15 de noviembre se ha inaugurado el nuevo Museo Virtual de la UB (MVUB), que incorpora un nuevo software que mejora el anterior. A las diecisiete colecciones que tenía hasta ahora, se han añadido cuatro nuevas, en una nueva interfaz más moderna que mejora su usabilidad. También se incorporan nuevas funcionalidades: exposiciones virtuales por temáticas y acceso a la visita virtual del Edificio Histórico en catalán, castellano e inglés.

El Museo Virtual de la Universidad de Barcelona (MVUB) fue el primer museo virtual de una universidad creado en España y nació con el objetivo de dar a conocer el rico patrimonio material de la UB. Dirigido especialmente a los estudiantes, se creó con la voluntad de trascender la comunidad universitaria y dar a conocer el patrimonio también al público en general. Una de sus principales singularidades es la heterogeneidad de las colecciones, que son, de hecho, un reflejo de la diversidad de áreas académicas de la Universidad, así como de la diversidad de génesis, procesos de trabajo y ubicaciones que las caracterizan. Entre las obras que se pueden ver en él se encuentran desde pinturas de los siglos XVI al XXI hasta instrumentos científicos, colecciones de biodiversidad o fondos bibliográficos de diversos ámbitos.

En este reportaje queremos recoger las opiniones de los tres vicerrectores que se han visto implicados en el proyecto desde su creación.

La impulsora del MVUB fue la catedrática emérita de Historia del Arte Lourdes Cirlot, que fue vicerrectora de Relaciones Institucionales y Cultura de la Universidad de Barcelona de 2008 a 2016. Cirlot recuerda que la motivación que la llevó a impulsar el Museo fue que ninguna universidad del Estado tenía ninguno en aquellos momentos, y ella había visto que existían en otros lugares del mundo: «Conocía la existencia de colecciones repartidas por muchas facultades, obra de profesores que habían dedicado horas a crearlas de forma desinteresada y altruista. Me di cuenta de que el patrimonio de la UB era inmenso, y que no estaba adecuadamente catalogado, ni siquiera fotografiado, con el peligro que eso representaba». «Nuestro trabajo, por tanto, debía ser preservarlo y museografiarlo», asegura. El proceso de creación del Museo fue extraordinariamente difícil: «No habría podido hacerlo sin un equipo magnífico, formado por Isabel Garcia Malet, Oriol Silvestre y Pili Mateos, que en año y medio fueron capaces de terminar el trabajo», explica. Siempre quedan flecos que se pueden mejorar, y Lourdes Cirlot manifiesta que le habría encantado «poder crear también un museo físico, pero por razones presupuestarias, tuvimos que renunciar a él». También pone de manifiesto que la difusión de la realidad del Museo es claramente mejorable, sobre todo entre los estudiantes: «Tenemos estudiantes que vienen de todo el mundo, y tengo la percepción de que no les hemos sabido estimular ni involucrar. Tenemos la mejor universidad del Estado, y el éxito de la UB podría ser aún mayor si encontráramos la forma de explotar la difusión de nuestro museo», afirma.

El profesor del Departamento de Artes y Conservación-Restauración de la Facultad de Bellas Artes Salvador Garcia Fortes fue vicerrector de Artes, Cultura y Patrimonio de 2016 a 2020. Dedicó su mandato a la consolidación y gestión del MVUB. «Las colecciones son el elemento nuclear del Museo Virtual y precisamente fueron protagonistas de la política patrimonial de mi vicerrectorado, dentro del Plan integral para la gestión, preservación y enriquecimiento del patrimonio cultural de la Universidad de Barcelona», explica. Una visión de conjunto que ampliaba el concepto de patrimonio más allá del material, incluyendo también el inmaterial y el humano, con sus respectivas nuevas colecciones. «Por todo ello —detalla Garcia Fortes—, se trabajó durante ese tiempo en un sistema integral de inventario y catalogación de nuestro patrimonio cultural y en una metodología de descripción y visualización de las colecciones». Como resultado de ese proceso, se llegó a la conclusión de la necesidad de proveer las colecciones patrimoniales de la UB de herramientas de documentación «integradas, versátiles, eficientes y normalizadas», que debían sustituir al MuseumPlus RIA, la aplicación básica del Museo Virtual. El cambio definitivo debía realizarse a lo largo de 2021. Para Garcia Fortes, el Museo Virtual ha sido «un espacio, una estructura, un concepto que ha posibilitado construir ese modelo integral del patrimonio cultural de la UB, muy necesario para conocer y reconocer nuestro patrimonio, material, inmaterial y humano». Pese al trabajo invertido, es consciente de que «el Museo Virtual no es suficientemente conocido ni por la comunidad universitaria ni por la sociedad». A su juicio, el futuro del Museo debería ser «versátil y adaptado a las nuevas demandas de gestión y difusión de nuestro patrimonio cultural». El exvicerrector asegura que «debería ser la herramienta fundamental para el conocimiento y reconocimiento del patrimonio cultural de la UB, tanto por parte de nuestra comunidad universitaria, como de la sociedad en su conjunto». Y concluye que «es una pieza imprescindible para cumplir la misión y las obligaciones que tiene la UB hacia su patrimonio cultural, de protección, conservación, acrecentamiento, investigación, difusión y fomento».

El profesor del Departamento de Historia y Arqueología Agustí Alcoberro es el actual vicerrector de Patrimonio y Actividades Culturales desde el pasado año. Especialista en Historia Moderna, fue también director del Museo de Historia de Cataluña de 2008 a 2014, lo que le da un perfil altamente especializado en temas museográficos a la hora de encarar la gestión del MVUB. Según explica, «el Museo Virtual presenta, en estos momentos, las piezas más emblemáticas de un gran número de colecciones de la Universidad de Barcelona, ​​con una gran variedad de temáticas y formas». «Y lo hace —puntualiza— con un lenguaje informático plenamente actualizado, que incita a la interacción y que pretende incitar la curiosidad del usuario». Aún faltan algunas colecciones, y hay que pasar también por una «etapa de gimnasia, es decir, ir comprobando en la práctica qué funciona y qué mejorar». «Pero lo más importante —asegura Alcoberro— es que el Museo debe ser una herramienta viva, debe generar noticia de forma permanente y debe crear comunidad».

Buen conocedor del mapa museográfico del país, Alcoberro cree que el Museo Virtual es la exposición permanente de las colecciones de la Universidad de Barcelona. «Todos los museos tienen una exposición permanente, formada por algunas de las piezas más emblemáticas; unas exposiciones temporales, que dan a conocer puntualmente algunos de sus fondos, y unos almacenes, que a menudo multiplican en volumen las dimensiones de la exposición permanente. El MVUB debe generar también exposiciones digitales y otras iniciativas que deben convertirse, a la vez, en el fondo de exposiciones digitales del Museo», afirma Alcoberro. Según el vicerrector, «la relación con los museos digamos clásicos de Cataluña solo puede ser de colaboración y simpatía, como lo ha sido siempre». De hecho, la Universidad de Barcelona lleva adelante proyectos conjuntos con grandes instituciones, como el MNAC, el CCCB, el Museo de Ciencias Naturales o el Museo de Historia de Cataluña, y con fundaciones privadas como la Fundación Vila Casas. Sobre la proyección social del Museo, auténtica piedra de toque del proyecto, nos contextualiza: «Cuando regresas sobre el proyecto fundacional del Edificio Histórico de nuestra Universidad, a mediados del siglo XIX, te das cuenta de que la institución universitaria se apoyaba sobre tres patas: la biblioteca, el jardín y el museo. De los tres elementos fundacionales, lo único que no se ha realizado como tal es el museo». Sin embargo, sí que se han desplegado numerosas colecciones vinculadas a facultades y departamentos, que disponen ahora de un abundantísimo patrimonio. Según Alcoberro, el Museo Virtual es la concreción, hoy, de la idea que habían tenido los fundadores del Edificio Histórico. «Hay que decir —añade— que es un éxito compartido, en el que hemos creído y participado los vicerrectores responsables del patrimonio cultural de varias etapas, y para el que hemos contado con un equipo técnico preparado y comprometido».