Vuelven las excavaciones arqueológicas de la UB en pleno Raval

Estudiantes del grado de Arqueología continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella.
Estudiantes del grado de Arqueología continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella.
Investigación
(25/06/2018)

Hoy comienza la nueva campaña de excavaciones en el yacimiento arqueológico situado en el solar de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona, en el barrio del Raval. Estudiantes del grado de Arqueología de la Facultad continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX. Este año se espera terminar de descubrir la estructura del antiguo obrador donde se manipulaban materias primas que muy probablemente servían para elaborar vidriados. El taller de Tarrés, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella, se completaba con los hornos ubicados en el mismo yacimiento, donde se cocían las piezas.

Estudiantes del grado de Arqueología continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella.
Estudiantes del grado de Arqueología continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella.
Investigación
25/06/2018

Hoy comienza la nueva campaña de excavaciones en el yacimiento arqueológico situado en el solar de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona, en el barrio del Raval. Estudiantes del grado de Arqueología de la Facultad continuarán el estudio del taller de Antoni Tarrés, un importante alfarero barcelonés del siglo XIX. Este año se espera terminar de descubrir la estructura del antiguo obrador donde se manipulaban materias primas que muy probablemente servían para elaborar vidriados. El taller de Tarrés, cuyas obras aún decoran fachadas de varios edificios de Ciutat Vella, se completaba con los hornos ubicados en el mismo yacimiento, donde se cocían las piezas.

De acuerdo con la vocación divulgativa del yacimiento, este año se volverá a acoger a estudiantes de secundaria y bachillerato para que realicen estancias de prácticas, y asimismo, se amplían las visitas abiertas al público los viernes por la tarde. Con estas visitas, los vecinos y la ciudadanía en general podrán ver el trabajo que hacen los arqueólogos para definir cuál era la estructura del antiguo taller, y conocer las tareas en un pequeño sector del yacimiento en el que se está excavando en niveles anteriores, correspondientes a períodos más antiguos.

El catedrático Josep Maria Gurt, coordinador de las excavaciones, recuerda que actualmente todavía se pueden ver más de sesenta trabajos del alfarero Tarrés en edificios de Barcelona. Gurt explica que, si bien es seguro que el yacimiento contiene fases constructivas anteriores al taller de Antoni Tarrés, las excavaciones de estas otras épocas deben realizarse con cuidado para no dañar los restos del obrador del antiguo alfarero.

 

Actividades divulgativas: ArqueUB

Hasta el 20 de julio, un total de ocho estudiantes de secundaria y bachillerato (dos cada semana) podrán realizar estancias en el yacimiento y conocer de cerca toda esta investigación arqueológica. Participarán en las tareas de la excavación tutorizados por estudiantes del grado de Arqueología y deberán elaborar un diario de campo en formato digital que se publicará en la web del proyecto ArqueUB. Las inscripciones se pueden cumplimentar a través de este formulario en línea.

Por otra parte, los viernes 29 de junio, y 6, 13 y 20 de julio, el yacimiento se abrirá a las visitas del público (la inscripción es gratuita y debe hacerse desde la web). Las sesiones incluyen una charla en un aula de la Facultad, en la que se explica qué hallazgos se están haciendo en el solar y otros aspectos prácticos y curiosidades sobre la tarea cotidiana de los arqueólogos.

Asimismo, los peatones que pasan por delante del yacimiento pueden ver una lona con textos e ilustraciones sobre el valor arqueológico del lugar y las actividades que en él se llevan a cabo, así como fotografías de piezas encontradas en el yacimiento en años anteriores.

Todas estas actividades de divulgación del yacimiento se enmarcan en el proyecto ArqueUB, organizado por la Unidad de Cultura Científica e Innovación (UCC+i) del Área de Comunicación de la UB y por la Sección de Prehistoria y Arqueología del Departamento de Historia y Arqueología de la UB, con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona y de la Fundación Española para el Conocimiento y la Tecnología (FECYT) - Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.

 

Una posibilidad excepcional para los estudiantes de Arqueología

El emplazamiento de la Facultad de Geografía e Historia en un lugar del barrio del Raval donde se han documentado testimonios arqueológicos desde el siglo XIV abre esta posibilidad, casi excepcional, de que los alumnos del grado de Arqueología puedan hacer prácticas en el mismo centro donde estudian. Estas actividades son posibles gracias a un convenio entre la UB y el Ayuntamiento de Barcelona, ​​que es la entidad titular del solar. El objetivo del acuerdo es excavar y estudiar el yacimiento a partir de un proyecto programado que permita desarrollar la investigación —desde la intervención arqueológica del terreno hasta el estudio de los materiales recuperados—, utilizar el proceso para experimentar una propuesta de docencia práctica de la arqueología, y recuperar y dignificar el lugar como espacio cívico.

El taller de Antoni Tarrés que las excavaciones han sacado a la luz disponía de tres grandes hornos, sótanos enormes para almacenar leña y distintos espacios dedicados a la producción cerámica. A pesar de que se dedicó a producir ladrillos, vasijas, adornos para fachadas u objetos cerámicos, el gran talento de Tarrés fue la decoración escultórica en terracota. Tanto es así, que su taller se convirtió en la primera fábrica que producía estos elementos ornamentales para aplicarlos a la arquitectura de la ciudad. El hijo de Antoni Tarrés heredó el negocio y, tras asociarse con otro alfarero de prestigio, decidió trasladarse al número 11 de la ronda de Sant Pere. En 1953 se llevó a cabo la última reforma del edificio de Tarrés, que se mantuvo sin más cambios hasta que fue derribado, en 2005.

El yacimiento del Raval es uno de los once espacios donde los estudiantes de Arqueología de la UB pueden realizar las asignaturas obligatorias de prácticas. Se trata de yacimientos situados en diversos lugares de Cataluña y que cubren todas las épocas: del periodo de la Prehistoria se encuentran los yacimientos del Abrigo del Xicotó (Alòs de Balaguer) y Can Sadurní (Begues); también se excava en el yacimiento ibérico del Puig Castellar (Santa Coloma de Gramenet). De la época romana están el Camp de les Lloses (Tona) y Torre Llauder (Mataró); de la época medieval, Santa Margarida (Martorell), L'Esquerda (Roda de Ter) y el castillo y monasterio sanjuanista en L'Alguaire. Las excavaciones en el Born, en Barcelona, pertenecen a la época moderna, mientras que el yacimiento de la Facultad de Geografía e Historia se enmarcaría en la época contemporánea, igual que la excavación en Vilalba dels Arcs.