La UB recuerda el legado docente y la calidad personal de Albert Cornet

Condujo el acto el vicedecano de Estudiantes y Calidad de la Facultad de Física, Pere Serra, quien propuso bautizar un espacio de la Facultad con el nombre del profesor Cornet. «Ha sido una de las personas que más ha contribuido a que todos nos sintamos en la facultad como en nuestra casa. Hay un tópico que, en el caso de Albert, procede: echaremos de menos tu sonrisa», expresó el vicedecano. Por su parte, el rector de la UB, Joan Guàrdia, se dirigió con ternura al homenajeado para explicarle: «Se nos ha ocurrido que pondremos tu nombre a uno de los premios de calidad docente. Ya ves lo importante que es lo que has hecho con tus alumnos».

También participó en la conmemoración del profesor Cornet el catedrático emérito Claudi Mans, quien explicó: «Una de las cosas que recuerdo con mayor alegría de él fue la renovación que hicimos de las prácticas». En la misma línea, la ex vicerrectora de Política Docente y Científica Maria Teresa Anguera destacó: «Tenía muchísimas ideas, vivía mucho la innovación docente. Lo recordaré cómo una persona inteligente, activa… que todo lo difícil lo hacía fácil».

Por su parte, la investigadora principal del Grupo de Investigación en Educación Moral (GREM), Maria Rosa Buxarrais, reconoció que la partida del profesor Cornet «dejó un vacío inmenso», y aseguró: «Su legado perdura porque fue un pionero. Quería conseguir que todos los profesores fuéramos conscientes de cómo damos las clases; tenía un entusiasmo que se contagiaba». El delegado del rector para la ciencia abierta, Ignasi Labastida, coincidió en subrayar el entusiasmo, la ilusión y las ganas de trabajar del profesor Cornet: «Sabía escuchar. Ha sido un referente, no solamente por la docencia, sino también como persona».

Finalmente, el jefe de la Oficina Técnica de Proyectos y Servicios Docentes, Jordi Pardo, utilizó una metáfora para explicar la forma de hacer de Cornet: «Era un jardinero, sabía dónde ponerte y qué abono darte para que crecieras». Su última doctoranda, Gemma Martín, insistió en la «importancia de llevar adelante su legado, pensando más allá de nosotros mismos, pensando en un bien común». Como representante del Departamento de Ingeniería Electrónica y Biomédica, Atilà Herms cerró los parlamentos relatando: «En el departamento éramos una familia, Albert tenía el efecto aglutinador de crear red. Llevaba buen ambiente, y seguirá siendo porque dejó semilla».

Ester Cornet, hija del homenajeado, se dirigió a los asistentes, también en nombre de su madre y su hermana, para agradecer a la comunidad universitaria que siga teniendo presente a su padre. El acto se completó con una danza a cargo del Ball de Gitanes de Castellar del Vallès, población de la que era natural el profesor Cornet.