Arqueólogos de la UB, en un proyecto internacional para datar las murallas de Carcasona

Vista de la muralla de Carcasona.
Vista de la muralla de Carcasona.
Investigación
(12/11/2014)

El Equipo de Investigación Arqueológica y Arqueométrica de la Universidad de Barcelona (ERAAUB) participa en un proyecto internacional para estudiar y datar las murallas de la ciudad de Carcasona. Los investigadores del ERAAUB se desplazaron en octubre pasado a la población francesa para hacer el trabajo de campo, y ahora analizan la información recogida. La ciudad medieval de Carcasona, declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, posee unas fortificaciones de gran complejidad, formadas por una doble muralla que se construyó en diferentes periodos históricos. Para su estudio ha sido necesario utilizar instrumentos técnicos de gran precisión y diseñar una metodología apropiada.

Vista de la muralla de Carcasona.
Vista de la muralla de Carcasona.
Investigación
12/11/2014

El Equipo de Investigación Arqueológica y Arqueométrica de la Universidad de Barcelona (ERAAUB) participa en un proyecto internacional para estudiar y datar las murallas de la ciudad de Carcasona. Los investigadores del ERAAUB se desplazaron en octubre pasado a la población francesa para hacer el trabajo de campo, y ahora analizan la información recogida. La ciudad medieval de Carcasona, declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, posee unas fortificaciones de gran complejidad, formadas por una doble muralla que se construyó en diferentes periodos históricos. Para su estudio ha sido necesario utilizar instrumentos técnicos de gran precisión y diseñar una metodología apropiada.

Hasta ahora no se había llevado a cabo una investigación científica para datar estas murallas. En la fortificación hay vestigios de varias épocas, por lo que existen tramos en los que se combinan aparejos de diferentes periodos, como los de la antigüedad tardía, los del siglo XII y los del XIII, junto con las restauraciones sucesivas, incluida toda la labor de restauración realizada por Viollet-le-Duc en el siglo XIX. «Murallas con una complejidad similar a las de Carcasona son, por ejemplo, las de Constantinopla para la antigüedad tardía o las de Provins, al sur de París, para la época medieval», explica la profesora del Departamento de Prehistoria, Historia Antigua y Arqueología de la UB Gisela Ripoll, corresponsable de este proyecto de investigación.

El equipo investigador ha trabajado en un tramo de muralla del flanco oeste, de unos cien metros de longitud, que va de la torre Pinte a la puerta del Aude. El Laboratorio de Fotogrametría Arquitectónica de la Universidad de Valladolid, que participa en el proyecto, ha tomado imágenes de gran precisión mediante tecnología láser y fotogrametría. Por otra parte, se han recogido numerosas muestras de mortero para realizar análisis arqueométricos y estudios comparativos. Ahora, la profesora Ripoll y los demás investigadores del proyecto están estudiando toda la documentación recogida en esta primera fase, tanto la de archivo como la procedente del trabajo de campo. «Se trata de una edificación de tal complejidad, que hemos tenido que consensuar una metodología específica para el caso de Carcasona», explica la investigadora.

El ERAAUB tiene una importante línea de trabajo en arquitectura romana, antigüedad tardía y medieval, hecho que lo ha convertido en socio de este proyecto, titulado Carcasona, la ciudad: estudio, relación y datación de las fortificaciones. Además de la UB, participan en él la Universidad de Aix-Marsella, la Universidad de Rennes y la Universidad de Valladolid, con el patrocinio de diversas instituciones, como la Dirección Regional de Asuntos Culturales (DRAC Languedoc-Rosellón), el Centro de los Monumentos Nacionales, el Consejo General del Aude y la asociación cultural Amical Laïque de Carcassonne. En total trabajan en el proyecto diecinueve investigadores coordinados por la arqueóloga francesa Marie-Élise Gardel. En el caso de la UB, además de Gisela Ripoll,  forman parte del proyecto los investigadores Francesc Tuset y Montserrat Valls.

La profesora Ripoll señala que esta investigación ayudará a conocer mejor el patrimonio histórico de la región del Aude y Carcasona, tanto científica como culturalmente. Además, subraya el hecho de que investigadores de la UB participen en un proyecto en una ciudad como Carcasona, «que tiene tantos lazos históricos con nuestro país desde época romana: desde haber sido la residencia de los condes de Barcelona hasta haberse convertido en refugio de los republicanos en el exilio».